Visto desde un punto de vista holístico,
la caída del cabello es algo que tiene relación con cambio, con soltar y el reposo que nos permitirá comenzar nuevos ciclos.
Otoño es una estación que conlleva muchos cambios en la naturaleza, es el momento en el que nos preparamos para el reposo. La naturaleza y su sabiduría lo saben y no teme a estos cambios, las aves se preparan, los animales, las plantas, el suelo y toda gota de vida lo hacen de la misma forma. Entonces, si el ser humano es parte de esta cadena de vida y de estos ciclos naturales, también deberíamos comprender que algunos de los cambios que tenemos con cada estación del año son absolutamente normales y así apreciar cada proceso.
Durante la estacion de Otoño la tierra empieza a alejarse de manera paulatina y casi imperceptible del sol, haciendo asi que las plantas al recibir menos luz solar tarden mas en hacer la fotosintesis, causando el color amarillo y posteriormente la caida de sus hojas. Con el cuerpo humano sucede algo similar, pues el sol nos ayuda a estimular la producción de hormonas, entre ellas la hormona D, que muchos conocen aún como vitamina D, esta al ser menos estimulada causa varios síntomas, uno de estos es la caída del cabello en personas de todas las edades y géneros, haciendo que sea muy notoria la pérdida, pues se deja en la ducha, en la ropa, en el auto y todo lugar que te imagines. Esto muchas veces asusta y preocupa a las personas, haciendo que compren productos capilares para evitar su caída, muchas veces sin aparente éxito. Si lo viéramos desde un punto de vista holístico y cíclico, lo podríamos tomar con más calma y eso de inmediato bajaría nuestro nivel de estrés y ansiedad por algo que de todas formas va a ocurrir.
Recuerda esto y siéntete un árbol en otoño, solo deja que suceda y prepara tu cuerpo para el cambio, el otoño cae, pero en invierno que es la siguiente estación, deja de caerse en grandes cantidades y se mantiene en reposo, estación invierno es la época en la que nuestro cabello crece más lento y deja de caerse en grandes mechas para caer de forma casi imperceptible. Esto es una forma de reconocernos más como parte de la naturaleza, observa, analiza, acepta y deja que suceda. Por su puesto además de saber esto, siempre hay herramientas que podemos utilizar para pasar estos ciclos de forma más llevadera, es algo como abonar nuestra tierra con una buena composta, es el tiempo idóneo para hacerte aliado de las vitaminas y suplementos alimenticios que te puedan aportar un porcentaje de los nutrientes que no podrás recibir de forma natural.
Existen para todo tipo de necesidades y gustos, dos de los suplementos que por excelencia son los predilectos para estaciones frías son el alga espirulina y las cápsulas de vitamina D. Nutre tu cuerpo de manera adecuada y siente que tienes el jardín más envidiable ; esto puede sonar a tontería, pero es tan real, vemos en la misma calle casas con jardines similares, pero siempre hay unos en los que las flores son más vivaces, los árboles más frondosos, el cesped mas verde y se debe al cuidado que les dan y los nutrientes que reciben, más no por tener más cuidados, quiere decir que se escaparan de cada proceso, incluyendo el dejar caer sus hojas al igual que el resto, los ciclos son iguales para todos, depende de ti que tan preparado o no estés, por lo pronto puedes comenzar con preocuparte menos y vivir a gusto cada proceso.
Espera cada estación preparado de acuerdo a las necesidades que nos pide y observa cómo pasamos por los mismos procesos, la salud tiene por naturaleza ser un estado dinámico, disfruta sus ritmos.
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